¡Ya llegó el otoño!
Pero como sabéis, me niego en rotundo a enterrar los estampados en el fondo del
armario. Por eso, cada vez que entro en una tienda y veo algo con dibujis, me
lanzo en picado. Y si ruge o maúlla… ¡mejor!

En mi fondo de
armario existe el más grande catálogo de “animal
print” de la historia del estampado felino. Sí señoras, es como un instinto irrefrenable: me vuelve loca un
leopardo. Poco me importan las teorías que dicen que es ordinario, hortera, que sienta fatal a las mujeres con talla grande... Me encanta, por eso en cuanto encuentro una nueva pieza para mi colección, me
afilo las uñas…
En esta ocasión, se
trata de un vestido de difícil definición: túnica, caftán, vestido camisero… Sea
como fuere, es de la nueva colección de H&M
y lo podéis encontrar hasta la talla 46.
El protagonista de
este animal print es un minino atigrado que tiene muy buen carácter, pero es
bastante travieso: Javier María. El otro día, le pillé probándose mis leggins de polipiel.
Y si bien mis granny
moka no son lo más indicado para este outfit, me gustan
tanto que pienso ponérmelos hasta para hacer senderismo. He dicho.
Para “coronar” el look,
nada como este anillo imperial. Uno de los básicos de mi joyero.